headphone.jpg

Desarrollo Personal, ¿sabes qué es el Desarrollo Personal? ¿Cómo aplicarlo en tu vida?

Hay áreas en tu vida que deseas cambiar o mejorar para lograr un mayor éxito y bienestar emocional. Comprender qué es el desarrollo personal te ayudará a alcanzar tus sueños y aspiraciones.

También conocido como crecimiento personal o desarrollo humano se define como un proceso de mejora que nos ayuda a adquirir y potenciar los recursos necesarios para alcanzar nuestros objetivos vitales. Es un procedimiento mediante el cual aprendemos ciertas técnicas y habilidades que nos llevarán al éxito.

En lugar de partir de la pregunta “¿Quién quiero ser?”, que nos lleva a un intento de superación personal, un proceso de cambio orientado hacia afuera, no hacia lo que somos y, por tanto, no seremos. eficaz o duradero. Un verdadero proceso de desarrollo sólo ocurre cuando comenzamos con la pregunta: “¿Quién soy yo?”.

¿Qué es el desarrollo personal?

El desarrollo personal es un proceso de superación y crecimiento personal que nos ayuda a identificar nuestros verdaderos recursos, intereses y objetivos vitales para adquirir y potenciar los recursos necesarios para alcanzar y dar sentido a nuestra vida.

¿Cómo se produce el desarrollo personal?

Es un proceso de introspección en el que intentamos descubrir nuestra propia identidad para explorar nuestros talentos, mejorar nuestra salud y cambiar nuestro estilo de vida en armonía con nuestra mente y cuerpo. Implica un movimiento interno destinado a ampliar nuestro campo de conciencia.

El desarrollo de la conciencia.

La bioneuroemoción concibe el desarrollo personal no como la causa sino como la consecuencia del aumento de la conciencia. Por esta razón, comportamientos No se enseñan sino herramientas para transformar cualquier experiencia en una oportunidad para conocerse a uno mismo y ampliar la conciencia.

Para evolucionar es fundamental, en cada situación difícil, dejar de esperar que los demás cambien y retomar tu responsabilidad, es decir, tu capacidad de responder a las Circunstancias que te causan estrés. Esta capacidad surge al no proyectar la causa de lo que te sucede afuera, es decir, entender que todo lo que te rodea tiene que ver contigo. Esta actitud te aleja de la culpa y el victimismo, te permite conocerte en profundidad, identificar y superar tus bloqueos y, en definitiva, retomar tu vida. Así, cada interacción se convierte en un aprendizaje significativo para vuestra evolución.

El desarrollo te lleva a tu destino.

–John Maxwell

Hábitos para entrenar emocionalmente bienestar

¿Qué hábitos te ayudan a gestionar la situación actual? ¿Qué puedes hacer para desarrollar tu equilibrio interior? ¿Quieres aprender algunas pautas para entrenar tus emociones?

Muchos hábitos pueden ayudarte a aprovechar tu gestión emocional y tus tiempos sin precedentes. A continuación te presentamos algunos que puedes aplicar de forma práctica.

Respeta y comunica tus estados emocionales:

Vivir situaciones en las que podemos sentir rabia, tristeza o miedo es normal. El hecho de reconocerlo, respetarlo y expresarlo se vuelve fundamental. Recuerde que ignorarlo o encubrirlo no hace que desaparezca. Simplemente hace que sea imposible de resolver. Para ello es importante el equilibrio entre exigir que los demás te respeten pero sin hacerlos culpables. Nuestros estados emocionales son nuestra responsabilidad, no la de los demás. Pero que sean apreciados es parte de nuestro proceso de respetarnos a nosotros mismos.

Cerrar tareas pendientes:

Imaginemos que nuestro cerebro es como una computadora. Cuantos más programas tengamos abiertos, más lento funcionará el procesador. Cerrar “carpetas” nos liberará de una gran carga de presión psíquica y nos permitirá centrarnos en gestionar nuestro presente. Todos tenemos tareas simples que pueden estar fallando nuestro sistema. Anotarlas y tachar una diariamente es un recurso práctico y sencillo para equilibrarnos.

Respeta tu descanso y tu espacio:

El tiempo de acción de calidad comienza con el tiempo “inactivo” de calidad. Ahorrar unas horas al día desconectados del mundo, centrados únicamente en nosotros mismos, es el mejor regalo que podemos hacer a las personas que nos rodean. Todos necesitamos aprender a escucharnos a nosotros mismos, un hábito que sólo se puede enseñar con el ejemplo. El tiempo de sueño y ocio es esencial para lograr espacios de trabajo eficaces, creativos y productivos.ce de la vida.

La velocidad nos lleva a “hacer” muchas cosas pero “vivir” muy pocas. Verás como situaciones cotidianas como comer, ducharnos, cocinar o limpiar cambian por completo cuando le dedicamos más tiempo del habitual. Cómo actuamos en el exterior es cómo estructuramos nosotros mismos por dentro. Si quieres detener la velocidad de tu mente, puedes empezar a modificar el ritmo de tus acciones.

Entrena tu curiosidad:

Aprendiendo a analizar y ver las cosas cotidianas con una nueva perspectiva es una excelente manera de desarrollar nuestra conciencia.

La curiosidad es una de las fortalezas personales que estudia la psicología positiva. Cuanto más examinan los expertos el interés, más pruebas encuentran de una vida más feliz y plena.

Claves para aumentar los niveles de curiosidad:

1. Cuestiona todo

2. Sal de la rutina y busca miniaventuras y desafíos (por pequeños que sean)

3. Hazte amigo de la incertidumbre y de tus miedos

4. Conecta con tu creatividad y crea cosas

5.Haga listas de áreas y actividades nuevas.

6. Regístrate en un nuevo curso

7. Come bien y muévete mucho para activar tu curiosidad

Aprende a reír y jugar:

Una parte innata del ser humano se alimenta del juego y de la risa. Cuando todo lo que hacemos es “importante” y “formal”, perdemos perspectiva y hacemos grande hasta el evento más insignificante. Jugar es una forma de aprender a flexibilizar nuestra mente y estimular nuestro lado creativo.

Recuerda que nuestro presente siempre es el momento perfecto para descubrir nuestros recursos internos, dejar de cubrir nuestras necesidades con la rutina y transformar nuestros miedos en herramientas de cambio.

“Si quieres resultados diferentes, no hagas lo mismo. mismo.

- Albert Einstein

3

7 consejos para controlar la ansiedad

La ansiedad sigue siendo uno de los problemas más recurrentes entre la población. Este sentimiento de angustia, aprensión, preocupación o miedo hacia determinados acontecimientos o actividades, puede aparecer rápidamente o dar lugar a cuadros clínicos más graves como el trastorno de ansiedad generalizada.

Por otro lado, cabe decir que a pesar de la alta incidencia de esta condición psicológica, no todas las personas dan el paso en busca de ayuda especializada.

Además, datos como los que revela un estudio del Dr. Jordi Alones del Instituto de Investigaciones Médicas de Barcelona, ​​España, indican que los servicios de salud aún necesitan mejorar mucho en la identificación de estos casos.

Sea como sea, hay un aspecto que nunca podemos dejar de lado. Los trastornos de ansiedad deben tratarse lo antes posible. Es necesario ser sensible a este tipo de realidades y buscar siempre ayuda experta y especializada.

Asimismo, y de forma complementaria, también podemos mejorar los hábitos de vida.

Ansiedad y factores predisponentes:

La aparición y mantenimiento de la ansiedad dependen de múltiples factores, como:

Factores predisponentes: genética. Estudios como el realizado en el Hospital Universitario de Würzburg revelan que, al desarrollar determinados trastornos de ansiedad, puede existir una predisposición biológica.

Los factores activadores incluyen el contexto social y la forma de reaccionar ante determinados estímulos.

Factores de mantenimiento: personalidad, estilo educativo y estilo de vida también determinan la aparición y mantenimiento de la ansiedad.

Recomendaciones para controlar la ansiedad:

Existen diversas alternativas para afrontar el cuadro sintomático de esta condición. Son enfoques sencillos, técnicas que podemos aplicar a diario y con las que no sólo podemos reducir el impacto de la ansiedad sino también (y no menos importante) prevenirla.

1. Expresar y gestionar emociones

Por ello, debemos evitar quedarnos callados, dejarnos comer por las dudas y la visión del peor escenario y, en cambio, atrevernos a verbalizar necesidades de forma asertiva, nombrar emociones, compartir inquietudes y defender límites personales…

Debemos expresarnos; Cualquier cosa que nos digamos a nosotros mismos, lo mejor es sacárnosla de nosotros.

Ante una situación en la que experimentamos ansiedad, uno de los factores que potencia esta sensación de estrés es que no nos damos permiso para compartir lo que nos pasa, lo que nos aísla de los demás. Al expresarlo, damos el primer paso para dejar de sentirnos separados.

Después de todo, expresar emociones es clave para la salud mental.

2: Escribe:

La escritura terapéutica es otra gran herramienta para gestionar y afrontar mejor la ansiedad.

Este ejercicio es adecuado y muy eficaz para aclarar necesidades, expresar inquietudes y traducir la tensión mental en palabras…

Una libreta y un lápiz bastan para ponerlo en práctica, y disponer de esa hora al día para desnudar las emociones en una hoja en blanco.

3: Autoconocimiento: ¿Qué nos permite esta estrategia?

  • Conocer cuáles son nuestras necesidades reales.
  • Entender qué nos motiva, dónde están nuestros límites y dónde está nuestro potencial.
  • Es también ese camino para encontrar un propósito vital que nos acompañe. Aquel con el que despertar nuevas ilusiones apagando parte de nuestros miedos.

4: atención plena

Es una práctica catártica y curativa para reducir los efectos del estrés y la ansiedad.

Nos permite estar más presentes, conectar con nuestras necesidades y aprender a respirar mejor…

Asimismo, este enfoque nos permite integrar nuevas técnicas de relajación para reducir la tensión mental y tener un mayor control sobre nuestros pensamientos y emociones…

Mindfulness es esa herramienta accesible para que todos utilicemos una consciencia más plena, donde podemos mejorar nuestra atención y aprender a aprovechar las oportunidades del aquí y ahora.

5. Realizar ejercicio físico

Salir a caminar, correr, bailar, nadar, andar en bicicleta… Todos estos ejercicios habituales nos ayudan a producir endorfinas, oxigenar el cerebro, aumentar nuestra dosis de serotonina y reducir el nivel de cortisol del organismo. Por ello, la actividad física es siempre una excelente y saludable herramienta para reducir los síntomas de ansiedad.

6: control de liberación

“Sé tú mismo, sé tú mismo”. Somos tan conscientes de lo que dirá la gente, de lo que pensarán los demás, que olvidamos quiénes somos. Podemos preguntarnos qué queremos cambiar o a quién queremos cambiar. ¿Hay algo que estamos haciendo sin querer hacerlo?

7: Toma acción

Supongamos que habitualmente sentimos ansiedad en un determinado lugar o en un momento concreto. En ese caso, podemos empezar a investigar qué peligro esconde esa situación en particular, preguntarnos por qué lo estamos viviendo de esta manera y, sobre todo, qué podemos cambiar.

Ante situaciones de ansiedad podemos interpretar que nuestro cuerpo pide a gritos una reacción por nuestra parte.

No todo el mundo reacciona de la misma manera ante la misma situación. Cada uno reacciona en base a su interpretación; Depende de los recuerdos, las experiencias y el contexto familiar. Cada situación de ansiedad es una oportunidad para descubrir aspectos ocultos de nuestra historia.

Mujer de negocios desesperada y estresada sentada en el suelo rodeada de papeleo arrugado: fracaso empresarial y concepto de crisis

El fracaso no existe y el éxito lo construimos nosotros

La situación que llamamos fracaso es una excelente oportunidad para aprender sobre nosotros mismos. Por supuesto, se requiere una buena dosis de humildad para reconocer lo que no estamos haciendo bien.

El discurso exitoso sobre el fracaso nos dice que primero debemos fracasar para lograr nuestras metas y alcanzar el éxito que deseamos.

Desde los espacios más autorizados de producción simbólica, somos bombardeados a diario con el mensaje de que el fracaso es algo bueno y que presenta una oportunidad porque de él surgen valiosas lecciones de vida. Escuchamos en todas partes que la clave del éxito es el fracaso y que es necesario experimentar reveses para alcanzar las alturas del éxito. Pero como decía Aristóteles sobre el ser, el fracaso se dice de muchas maneras.

Las personas exitosas han caído muchas veces y han aprendido cosas maravillosas. Las situaciones difíciles, interpretadas como una hermosa oportunidad de aprendizaje, te convierten en un “roble” ante situaciones nuevas. Si los ve como una gran catástrofe, sufrirá mucho y encontrará muchas excusas.

Thomas Edison dijo la famosa frase: "Muchos de los fracasos de la vida se deben a personas que no se dieron cuenta de lo cerca que estaban del éxito cuando se dieron por vencidos". Esta cita destaca el hecho de que muchas personas que no han logrado nada en la vida a menudo no reconocen lo cerca que estaban del éxito en el momento en que decidieron darse por vencidos.

Sirve como recordatorio de que la perseverancia y la perseverancia son cruciales ante los desafíos y reveses. El éxito puede estar a la vuelta de la esquina y darse por vencido demasiado pronto puede impedir que uno alcance sus objetivos y desarrolle todo su potencial. El propio Edison experimentó numerosos fracasos antes de inventar la bombilla, pero su determinación y negativa a darse por vencido finalmente lo llevaron a su éxito innovador.

La cita alienta a las personas a mantener una mentalidad resiliente, aceptar los fracasos como oportunidades de aprendizaje y seguir avanzando, ya que el éxito puede estar esperando justo más allá del punto en el que sienten ganas de darse por vencido.

En realidad, los fracasos no existen; sólo hay opiniones, y la forma en que reaccionamos ante estas opiniones determina nuestro éxito.

Después de experimentar una derrota, uno puede actuar de diferentes maneras: renunciar a su idea (lo que sería una verdadera derrota), ignorar lo que dicen los demás y volver a intentarlo (tampoco es demasiado inteligente, ya que repetir las mismas acciones y esperar resultados diferentes indica un ligero grado de locura), o cambiar su enfoque y hacer otro intento.

El éxito de lo que hacemos depende de nuestra paciencia y del esfuerzo que ponemos en resolver los conflictos que surgen. Es importante comprender que el éxito no se logra de la noche a la mañana, sino mediante una dedicación constante y la voluntad de adaptarse y superar los desafíos.